Miel de espliego

Lavandula., familia Lamiaceae
Floración: Julio-Agosto

La miel de espliego, con su origen en las floraciones de Lavandula, se presenta como un exquisito producto natural que refleja la riqueza botánica de las regiones donde se produce. La interacción de las abejas con estas plantas aromáticas y otras floraciones circundantes da lugar a una miel de características únicas y diferenciadas.

El término espliego se refiere comúnmente a varias especies de Lavandula, principalmente Lavandula angustifolia, L. latifolia y L. spica. Estas plantas leñosas y aromáticas, con una altura promedio de 40 a 60 cm, se caracterizan por sus hojas alargadas y pelosas, y por sus flores azuladas agrupadas en la parte terminal de tallos largos sin hojas. Estas especies prosperan en los suelos calizos de la mitad norte de la Península Ibérica y en algunas regiones montañosas de Andalucía.

18-34 mm Pfund
Blanco
35-48 mm Pfund
Ámbar extra claro
49-83 mm Pfund
Ámbar claro

Color: Esta miel exhibe un tono ámbar, variando desde el ámbar extra claro en sus formas más puras, como la derivada del lavandín, hasta tonos más oscuros cuando las abejas recolectan mielatos de encina. La presencia de ajedrea (Satureja montana) también influye en su coloración, aportando matices más claros.

Aroma: Posee un aroma distintivo a lavanda, notablemente intenso y característico, sobresaliendo entre otras mieles peninsulares por su intensidad olfativa. Además, como es común en las mieles de esta familia, presenta notas fenólicas en su perfil aromático.

Sabor: En el paladar, se percibe su dulzura acompañada de notas ácidas. En las variantes más oscuras, influenciadas por los mielatos, se pueden detectar toques salados. La expansión del cultivo de girasol en la zona de espliegales, aunque actualmente en disminución debido a cambios en las políticas de subvenciones de la Unión Europea, ha introducido componentes de esta oleaginosa en algunas mieles de espliego, enriqueciendo aún más su complejo perfil gustativo.

Miel de Espliego

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Origen Natural

En los serenos y fragantes campos de espliego, se desarrolla una variedad de miel única: la miel de espliego. Esta miel monofloral, derivada de las floraciones del espliego, una planta aromática similar a la lavanda, es un producto distintivo de las regiones donde el espliego abunda en el paisaje.

Estos campos, pintados de un violeta intenso y exudando un aroma embriagador, ofrecen a las abejas un néctar especial que se transforma en una miel con cualidades excepcionales.

Características de la miel de espliego

La miel de espliego es reconocida por su sabor refinado y suave, que refleja la elegancia de las flores de espliego. Su color suele ser un ámbar claro, a veces con tonos que pueden variar hacia matices más dorados, simbolizando la pureza del néctar del espliego.

Esta miel destaca por un aroma floral y delicadamente herbáceo, ofreciendo una experiencia olfativa serena y placentera. Su sabor es ligeramente dulce con un toque herbal suave, distinguiéndola de otras variedades de miel.

La textura de la miel de espliego es uniforme y cremosa, y aunque puede cristalizar con el tiempo, este proceso natural no altera sus cualidades ni su sabor.

Propiedades de la miel de espliego

La miel de espliego combina las propiedades terapéuticas del espliego con los beneficios naturales de la miel. Es conocida por su acción calmante y relajante, ideal para momentos de estrés o para inducir al sueño.

Posee propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, beneficiando la salud digestiva y reforzando el sistema inmunológico. Su contenido en antioxidantes y compuestos orgánicos la hacen valiosa para mantener una buena salud.

Además, la miel de espliego es muy apreciada en la cocina gourmet por su sabor único, siendo un complemento perfecto para postres y platos que requieren un toque dulce y sutilmente aromático. También es utilizada en la cosmética natural por sus propiedades suavizantes y regenerativas para la piel. Su singularidad y pureza la hacen una miel altamente valorada por su versatilidad y beneficios.

Enlace interés: Real Decreto 1049/2003, de 1 de agosto, por el que se aprueba la Norma de calidad relativa a la miel.